lunes, 20 de junio de 2011

ESTRAMONIO

Autor: AnSaGuCa.
Titulo: Estramonio.
Disclaimer: Estos personajes no me pertenecen y no recibo ningún beneficio económico por ellos.
Genero: Tragedia.
Tipo: One-shots
Rating: Todo público.
Personajes: Choi MinHo de SHINee.
Nota: Basado en la historia de The lady of Shalott de John William Waterhouse.
Les aconsejo escuchar la canción Shalott de Emilie Autumn; cuenta la misma historia que van a leer y es de mis canciones (de ella) favorita.
Disfruten.

ESTRAMONIO



El estramonio no es bonito a primera vista, es verde o café y esta lleno de espinos para su defensa propia. Suele florecer en verano o principios del otoño.
Significa invención.


Antiguamente en la época de los caballeros y princesas, brujas y dragones, solían contarse historias de damiselas en apuros que eran rescatadas por un valiente caballero en su corcel blanco; este cuento apareció en aquella época.

En las tierras donde reinaban poderos Reyes que poseían mesas redondas, se levantaban muchas islas alrededor. Una de ellas, pequeña y sin mucha importancia era la isla de Shalott. Ahí había una torre; no era especialmente alta ni se encontraba custodiada por un furioso dragón. Una anciana mujer perturbada porque la vida se había portado demasiado cruel con ella, vivía en esa isla, en esa torre.

Tiempo atrás había secuestrado a un recién nacido; su madre había muerto al traerle al mudo y ella lo había tomado al no encontrar a nadie alrededor de la desgraciada mujer. Cuido del pequeño como si fuera propio, enseñándole tantas cosas como le permitía su escaso conocimiento.

La anciana quería al niño y este también la quería a ella, porque era la única persona que conocía dentro de aquella solitaria isla. El pequeño cantaba cada vez que se le pedía e incluso sin que se le ordenara; le gustaba cantar y tenia una voz única; comparable solo, quizá, con algunas voces del coro destinado a la corte real. Aunque para la mujer era la mejor voz de todas.

Cuando el niño cumplió doce años la mujer comenzó a temer que se apartara de ella. Tan bonita voz y bien parecido era, que temía que se lo llevaran lejos. Y, sufriendo los dos, le encerró en una habitación sin puertas ni ventanas. Únicamente un pequeño espacio donde ella le pasaba comida y agua. La anciana le visitaba todos los días para escucharlo cantar, y él, obedecía.

La habitación en la que permanecía cautivo era toda de piedras, con techos altos, por lo que en el día era fresca y en la noche templada. Su cama, hecha de brezos era cómoda; al menos lo era en aquella época. No tenía más muebles. Sin embargo, en la pared, había un agujero muy pequeño que le servía de ventana.

Desde ahí se observaba un prado enorme, la playa, un lago y más allá un castillo. Y por las noches, desde el agujero, miraba las estrellas que, a falta de electricidad que por aquella época no existía, brillaban tan intensamente como la luna.

“Esta habitación va a ser mi tumba y no hay nadie que pueda salvarme”



Y extrañaba estar fuera; soportando el dolor de los recuerdos, del viento frio y el sol acariciando su piel. Podía escuchar atreves del muro como chocaban las gotas de lluvia contra la torre pero ya no podría sentirla.

“¿Cuánto tiempo puedo vivir de esta forma? ¿Hay alguien a quien le pueda pagar para que me deje ir?”



Estaba arto de las penumbras de su habitación. Esta arto del aire húmedo y de la voz que le acompañaba por las tardes a través del muro y le pedía cantar.

“Todos pueden ver como baja el sol, entonces ¿Por qué no puedo yo?”



El pequeño que después de tantos años que pasaron, ahora era casi un hombre. Era alto y muy bien parecido; de cabello oscuro y largo a falta de algo con que cortarlo; unos ojos grandes y alegres que se iluminaban cuando su hermosa sonrisa aparecía.

Un día mientras el muchacho miraba el campo que se pintaba de anaranjados por el atardecer, atisbo al otro lado del lago, cerca del castillo, a una princesa, según él. Ella era de belleza tal que no seria capaz de describirla. Su figura era delicada y el vestido blanco que llevaba ondeaba al viento haciendo parecer de vez en cuando que tenia alas; un ángel.

“Esa mujer será mi muerte porque es todo lo que deseé en mi vida”



Se sintió eclipsado y por primera vez deseo salir de la torre. Sus muñecas pesaron de repente y sintió las frías cadenas que le aprisionaban. Nunca podría estar con su amada, porque, desde aquel momento lo supo, su corazón le dijo que aquella mujer era el amor que le daría vida y muerte.

“Se que no sabe mi nombre; que todos los hombres son lo mismo para ella, pero aun así tengo que salir de este lugar porque no creo que pueda enfrentar una noche más”



Paso horas arañando las piedras tratando de engrandecer su diminuta ventana y al fin, con las manos ensangrentadas escapo de la torre de la cual había sido cautivó.

“Todos pueden ver como sube la marea, entonces ¿Por qué no puedo yo?”



Corrió por el campo lo más rápido que le permitían las cadenas soportando el viento de invierno que por la noche era el doble de frio.

“Encontrare mi muerte, pero con mi ultimo aliento le cantare que la amo”



No importaba que su princesa no le correspondiera, el quería mirarla nuevamente, un poco más de cerca… aun si moría en el intento ¿Qué más importaba? Moriría igualmente en aquella oscura torre y continuo con más animo su camino.
¿Qué más importaba? Morir ahí o aquí.

Llego a la orilla del lago donde se había formado una diminuta playa; todo era hermoso, pero nervioso como estaba, no se dio el tiempo para contemplarlo. Encontró una pequeña barca atada a una piedra en la orilla y subió comenzando a remar inmediatamente. El agua incluso se escarchaba por el frio ¿qué podría esperar él? La sangre se le congelaba en las venas, pero sus manos entumecidas continuaban, aunque con más lentitud, el movimiento circular de remar hacia la orilla contraria.

“Ahora entiendo un par de cosas, porque se que estoy maldito, se que tengo que morir”



La barca se movía lentamente atravesando el lago congelado, cada vez más lento hasta que finalmente, cuando casi alcanzaba la mitad, dejo de moverse.

“Todos pueden ver como sus sueños se llevan acabo, entonces ¿Por qué no puedo yo?”

FIN



¡Ah! Es trágico (me encanta T^T).
En realidad no se entiende que el muchacho es MinHo, pero pensaba en él cuando lo escribí así que par mi es él; ustedes pueden imaginar a quien gusten. De cualquier modo en la historia original, creo, Elena es la muchacha que esta encerrada y el príncipe que mira a lo lejos es Lancelot.

CLAVEL DOBLE

Autor: AnSaGuCa.
Título: Clavel doble.
Rating: Todo publico.
Género: Drama / Romance.

Personajes: SHINee.

Desde la antigüedad, los claveles han sido apreciados y admirados por su belleza, aroma y colorido.

El clavel doble significa amor ardiente.

CLAVEL DOBLE

¿Por qué?

Si todos pueden enamorarse, entonces ¿Por qué no puedo yo? ¿Acaso no tengo derecho a sentir amor?

Y, si el amor es dolor y felicidad ¿por que solo puedo sentir el dolor?

¿Es lo que merezco por enamorarme de él?

Su cabeza era un lio, hacia semanas que no podía concentrarse en nada y estaba cansado y arto de que le preguntaran si se encontraba bien. No, no estaba bien, pero tampoco entenderían cual era su estúpida razón para tener la cabeza en las nubes.

Tomo la decisión, por fin, mientras masticaba su comida.

- Estoy enamorado –hablo al aire mientras todos estaban sentados con sus respectivos platos de comida; no pudieron evitar detenerse a escuchar debido a la curiosidad.

- ¿Quién es ella? –pregunto muy interesado JongHyun.

- Es un chico –hablo igualmente como si nada, como si realmente no fuera una noticia alucinante. Todos quedaron en silencio unos momentos.

- ¿Lo conocemos? –pregunto KiBum.

- Si, es un idol.

La curiosidad mata.

- ¿Quién es?

- Es de un grupo llamado SHINee –tomo un poco de jugo y luego volvió a llevar un poco de comida a su boca, la situación era tan irreal que por un momento todos creyeron que TaeMin les estaba haciendo una broma, pero ni siquiera les devolvía la mirada, nada.

- ¿Eh? ¿Qué has dicho?

- No sean ridículos –habló, ahora mirándolos fijamente- No pienso volver a repetir nada.

Termino de beber su jugo y se levanto recogiendo sus platos para llevarlos a la cocina y lavarlos.

Nadie se movió de su lugar y solo se miraban entre si ¿a quién se refiere? La respuesta más obvia era MinHo, todos le miraron y el negó con la cabeza, no tenia idea, ¿era él?

Pasaron las horas y casi a media noche MinHo al fin se animo a preguntarle a TaeMin.

- Oye… yo… yo de verdad te aprecio Minie, pero esto… sabes yo no…

- ¿De que hablas?

- ¿De que?... tú dijiste… en el desayuno –dijo tartamudeando y con una expresión de extrañeza en su rostro; luego seria que siempre si era un broma para alterarlo.

- No te creas tanto –se burlo el menor- No eres tú.

- ¿Eh? –no sabia si alegrarse por quitarse el peso de encima u ofenderse por semejante rechazo.

- Nada de “¿eh?” ahora lárgate.

- Oye, estos días has estado más alterable que…

- Lárgate Choi, en verdad no tengo ganas para esto.

- ¿Es JinKi? –pregunto recordando como el mayor se esmeraba por hacerle el desayuno y se preocupaba tanto por él.

- MinHo, as el favor de dejarme en paz.

- ¡Te gusta JinKi! –grito alterado provocando que lo escucharan en la sala donde estaban los demás descansando y, obviamente, el líder. Una almohada choco contra el rostro del más alto.

En la mañana todo había transcurrido como normalmente sucedía. Onew se había levantado para hacerle el desayuno a TaeMin y Key le había sacado de la misma reprochando que si bien no era el mejor cocinero del mundo podía hacerlo mejor que él.

- Fuera de aquí –ordeno.

- Ya casi termino.

KiBum le reprocho con la mirada que no le obedeciera y en algún punto esa mirada se había convertido en resentimiento y desconfianza para con su líder… y no era culpa suya.

- ¿Qué piensas de lo que dijo TaeMin ayer? –Onew siguió con lo suyo ignorando la pregunta de Key por unos minutos.

- No lo se. Yo no puedo hacer nada al respecto.

- Quiero que hables con él –pidió como toda madre cuando le dice a su pareja “es tiempo de que le hables de sexo al niño”

- ¿Por qué yo? –se quejo. Era claro que la razón era el grito de MinHo que lo mencionaba como responsable, pero Key prefirió no utilizar esa salida, si no una más fuerte.

- Porque eres el líder.

- TaeMin –comenzó Onew- ¿Te gustaría ir a tomar un helado conmigo después del desayuno?

Todos le miraron extraño, pero ¡dios mío! ¿Quien podría resistir un poco de helado? TaeMin no.

- ¡Si! –respondió entusiasmado. JongHyun tenía los ojos abiertos como platos, mirando a uno y al otro.

- Cierra la boca –ordeno Key dándole un golpe suave a su mandíbula para que la cerrase. Todos estaban sorprendidos pero KiBum era el único que no parecía a gusto con la idea de JinKi aun cuando era él quien se lo había pedido. ¿Por qué diablos tenían que salir por un helado? Él solo le había dicho que hablara con el pequeño, en la sala y sin hacer escándalo. Si después de aquello, con lo influenciable que era JinKi, regresaban siendo pareja le daría un paro cardiaco.

- No comas demasiado helado, tiene mucha grasa y te puede hacer mal –TaeMin sonrió.

- Si, mamá.

La heladería no era tal cosa. Un señor de la tercera edad se detenía a vender helados a dos calles de su departamento y ellos adoraban el sabor que tenían.

- Dos helados por favor.

Se sentaron en la única banca que se encontraba protegida del sol en el centro del parque y esperaron a que se acabara su frio dulce para comenzar a hablar.

- JinKi…

- ¿Piensas decirle o esperaras a que le de un ataque?

- ¿Qué?

- KiBum no es tan fuerte como parece, lo sabes.

TaeMin sonrió al verse descubierto.

- ¿Desde cuando lo sabes?

- Aunque no parezca, yo soy el líder de SHINee, es mi trabajo saber esas cosas. Pero yo no pienso decir nada.

- Gracias –dio un largo suspiro- Hoy estaba un poco cabreado.

- Le preocupas. No quiere que su hijo ande por ahí con cualquiera.

- ¿Qué siente él por mi?

- No lo se. Era fácil leerte porque tu ya sabias que querías. KiBum… es demasiado extraño.

- Ya se tardaron mucho –se quejo Key.

- ¡Oh! ¿Tu crees que ellos…? –hablo JongHyun dándole indirectas a MinHo.

- ¡Cállense!

- Eh, tranquilo, sabes que solo estoy jugando. ¿Acaso estas celoso?

- No estoy celoso de nada; ellos no deberían estar tanto tiempo fuera, hay frio y podrían enfermarse.

- Estamos en verano Key, hay un calor infernal.

- No me contradigas.

- ¡Llegamos! –grito TaeMin en la entrada.

- ¿Por qué tardaron tanto? –no fue Key si no MinHo el que pregunto.

- Las clases de educación sexual son tardadas –se burlo Onew; KiBum lo fulmino con la mirada- Es broma.

- Más te vale.

- Pero tendremos que explicarle si algo resulta.

- Mi pequeño no ara ese tipo de cosas.

- Ya esta grande.

- No, tú eres el único pervertido en este departamento y no quiero que le enseñes esas cosas.

- Por favor, un día tendrá que hacerlo.

- No ahora y mucho menos pronto.

- Claro, pero es bueno que sepa que hay muchos tipos de anticonceptivos y esas cosas.

- Como sea esa clase no se la darás tú.

- Creí que yo era el líder –dijo haciendo hincapié en la ultima palabra, dando a entender que podían cambiarla fácilmente por “padre”.

- Pero yo soy quien cuida de él, así que tengo derecho a decidir quien se lo dirá y cuando.

TaeMin ya ni siquiera les prestaba atención y se había recostado en el sillón para ver televisión.

- Mamá…

- No me interrumpas.

- Mamá yo ya se esas cosas. JongHyun me las explicó hace mucho tiempo.

- ¿Qué? –TaeMin sonrió.

- Es broma –KiBum dirigió una mirada de profundo odio hacia el rubio y luego fue a abrazar a su pequeño.

- Tienes la ropa manchada con helado, ve a cambiarte.

- Pero…

- Ahora mismo.

- Si, mamá.

JinKi sonrió desde su lugar a un lado de la puerta e intercambio miradas cómplices con el pequeño cuando paso a su lado.

Era muy pronto para que KiBum supiera del amor que le tenía el más pequeño. Por ahora, TaeMin se conformaba con ser el hijo de mamá y que este le consintiera. Algún día, cuando fuera un poco más fuerte podría confesarlo. Porque él no era un chico fuerte y hay que serlo para poder amar.

- ¿Y bien? –reclamo KiBum dos días después.

- ¿Bien que? –se defendió Onew.

- ¿Qué le dijiste a TaeMin cuando fueron por helado?

- Lo que querías que le dijera. Que fuera un buen chico y tomara con calma sus sentimientos.

- ¿Cómo? ¿Es enserio? ¿Quién es esa persona?

- Él me dijo, que cuando estuviera preparado, le diría a todos quien es. Por ahora le aconseje que se dedicara al grupo.

- ¿Pero quien es? ¿Te lo dijo? ¿Eres tú?

JinKi sonrió.

- TaeMin se a vuelto muy apuesto ¿No crees?

FLOR DE CERA

Autor: AnSaGuCa.
Titulo: Flor de cera.
Genero: Ni idea.
Rating: Todo público.
Personajes: Lee JinKi y Kim KiBum de SHINee.

FLOR DE CERA

Hacia un frio tiritante y, para colmo, la calefacción se había descompuesto.

Key salió perezosamente de su habitación para prepararse una gran taza de chocolate hirviendo. Se enrolló un poco las mangas de su suéter favorito y coloco un poco de agua en una pequeña olla; mientras, en una taza, aquella que decía “Propiedad de Kim KiBum” en el fondo, colocaba azúcar y…

… el bote con el chocolate estaba vacio, totalmente. Ni siquiera quedaban las migajas. Con las ganas que tenia de un buen chocolate.

Sopeso la idea de ir a comprar el chocolate o preparar otra cosa. Fuera estaba tan helado que le parecía extraño que aun no nevara.

- Café –susurro.

No le gustaba el sabor amargo del café, pero no quería salir y un poco de leche y más azúcar podían solucionar casi cualquier cosa.

Termino de colocar toda su merienda en una diminuta bandeja; servilleta, cuchara, dos galletas de la alacena; tal como si fuera el café de una cómoda cafetería de los Ángeles a la que adoraba ir cuando vivía en ese lugar.

Jinki entro en la cocina con unas ridículas pantuflas en forma de patas de dinosaurio y un pijama de algodón a cuadros que combinan de manera patética con sus lentes y el cabello desarreglado que llevaba.

Key lo miro decepcionado, el hecho de que no tuvieran nada que hacer aquel día no significaba que pudiera andar por el departamento en aquel deplorable estado. ¿Qué pasaría si un día se vieran obligados a salir así si el edificio se incendiara? Digo, podría pasar.

Sacudió un poco su cabeza tratando de borrar de su mente los encabezados en las paginas de internet de ellos en… aquel horror de ropa. Seguidamente verifico la estufa; todos los botones estaban apagados.

Onew abrió la nevera y saco un bote de helado. Key le miro nuevamente con horror. ¿Helado? ¿Con aquel espantoso frio? ¡¿Helado?!

El mayor saco un poco en un traste y regreso el resto al congelador en la misma posición en la que había estado para que el dueño de aquel no se diera cuenta.

TaeMin no solía reclamar si tocaban sus cosas, pero SU helado, su delicioso helado era INTOCABLE.

- ¿Estas mal de la cabeza? –hablo Key, por fin. Onew le miro con duda- ¿Cómo diablos te atreves a comer helado con un clima como este?

- Se me antojo. Además, si tomas algo caliente –dijo señalando el café que reposaba en la mesa-, tu cuerpo se calentara y tendrás más frio; pero si tomas algo helado tu cuerpo se enfría y, al estar a la misma temperatura, ya no tienes frio.

El rostro de Key era un poema. Aquello era el tipo de cosas que los padres les decían a los niños de cinco años para que realizaran algo que querían. ¿Cómo demonios podía creer eso? ¿De verdad él fue segundo lugar en promedio más alto de su escuela?

KiBum dio un largo y profundo suspiro, después de todo, mostrarse tolerante con la estupidez es difícil para las personas ingeniosas.

JinKi, mientras tanto, no perdía detalle de su dongseng, estaba consiente de lo que había dicho y que el menor lo consideraba ridículo como todo lo demás que decía, pero, aun así, el creía totalmente en eso, después de todo, siempre le había funcionado.

Llevo una gran cucharada de helado a su boca y algo del mismo quedo impregnado en sus labios. ¿Quién, es su sano juicio, podría asegurar que Onew era el mayor?

Sonrió un poco de forma traviesa, quería borrar la forma en la Key lo miraba porque le hacia sentir estúpido; recordó, entonces, que JongHyun fingía acercarse a darles un beso para jugar, su victima siempre se alejaba antes de llegar a su objetivo y todos reían.

Se movió no demasiado rápido, haciendo mueca de un beso demasiado infantil. KiBum pudo y debió quitarse; tuvo tiempo, pero no lo hizo. Porque el frio no le dejaba reaccionar rápidamente o porque nunca imagino que Onew realmente intentara hacer algo parecido, nunca sabría que y tampoco se mataría pensando en eso.

Así que sus labios chocaron, fríos; porque Key temblaba por el clima y no había podido beber su café y Onew porque el helado casi se los había entumecido.

No fue mas que un toque, demasiado torpe para no considerarlo patético, pero, aunque no había ni una pisca de lujuria o siquiera intención, una oleada de calor cubrió sus cuerpos y les hizo sonrojar a ambos, separándose velozmente.

- No –tartamudeo-… cuando JongHyun… él… MinHo -su cabeza repetía “cállate, JinKi, cállate.”- Perdón –y sin más salió de la cocina desapareciendo por la puerta aquellas patas de dinosaurio y la taza de helado. ¿Por qué le funcionaba a JongHyun y a él no?

Key tardo unos segundos más en reaccionar. Por primera vez Onew entendía el “chiste” más rápido que el todopoderoso. Lamio sus labios pacientemente cuando reacciono, borrando una parte de los restos de helado que habían quedado por culpa de JinKi.

Se sonrojo otro poco al pensar que su líder lo había besado, sin intención, un accidente, pero sus labios se habían juntado. Y ahora estaba tan arrebolado que ya no tenia frio y las ganas de beber café se le habían quitado.

Miro la nevera un poco hasta que se decidió a abrirla y sacar el bote de helado. No pesaba demasiado, lo abrió y se quedo mirando el vacio, nuevamente como en la lata de chocolate; ¿Por qué les gustaba poner los botes vacios?

TaeMin entro en ese momento a la cocina y contemplo horrorizado como Key sostenía su bote de helado totalmente vacio.

- ¡Hyung! –grito- ¡Te comiste mi helado! –le acuso.

- No, no fui yo –se defendió.

- Tienes helado en los labios ¡No mientas!

- TaeMin, de verdad no fui yo… no…

Se lamio los labios nuevamente. Ese maldito de Lee JinKi. ¡Todo había sido una trampa para inculparlo! Desgraciado, siendo tan idiota parecía ser más astuto que él.

FLOR DE LIS

Autor: AnSaGuCa.
Titulo: Flor de lis.

Genero: Slash.
Rating: Todo público.
Personajes: Lee JinKi y Lee TaeMin de SHINee.

Nota: la Historia tomada de “La princesa y el guisante” de Hans Andersen.

Desde la edad media es considerada un símbolo de la realeza francesa. Representa la inocencia y alegría.

La flor de lis significa belleza atractiva.

FLOR DE LIS

Una vez era un príncipe que quería casarse con una princesa, pero con una princesa de sangre real… no, olviden eso; él era un artista, aspirante a idol contratado en la muy famosa y reconocida SM Entertaiment; y lo que más quería era tener buenos compañeros de grupo y muchos fans. Trabajo mucho en busca de buenos vocalistas con los que unirse y así poder brillar en el escenario. Los cantantes abundaban, sobretodo en un lugar como Seúl, pero se hacia difícil descubrir si verdaderamente tenían talento. El chico volvió a la SM muy decepcionado y estaba triste y pesaroso, porque deseaba con toda su alma buenos cantantes.

Cierto día se desencadeno una horrible tempestad; era día de audiciones y la gente aparecía a torrentes y el lugar parecía un infierno de gritos y empujones. ¡Era espantoso! De pronto, llamaron a la puerta para que pasaran los siguientes chicos en audicionar.

Con gran asombro adivino que tenia delante a un cantante. Pero ¡Dios mío! ¡En qué lastimoso estado venia con aquel genterio horroroso! Todo jaloneado de la ropa, cabellos revueltos y algunos rasguños. Más parecía un mendigo que un cantante, aunque él afirmaba que lo era.

- Pronto lo sabremos –pensaron los directivos de la SM. Y, sin decir nada a nadie, prepararon miles de pruebas de baile y canto, incluidas pruebas de imagen y actuación. El chico tubo que pasar por todas las pruebas. Cuando termino exitosamente todas, le preguntaron como se había sentido.

- ¡Oh! ¡Sin problemas! –contesto sonriente.

Entonces conocieron que era un cantante de verdad, porque, había pasado todo esforzándose al máximo y sin quejarse. Solo un verdadero cantante podía soportar tanto abuso y seguir sonriendo.

El príncipe, digo, el ahora líder del grupo tomo a este chico por esposa, emm…. como nuevo miembro en el grupo sabiendo que aceptaba con él a un gran artista.

Y las pruebas de la SM siguen igual que siempre si no es que ahora son más duras.

¡Y he aquí un verdadero cuento!

FIN

Para quien no entendió (por que tampoco es que este exactamente explicado), el príncipe es Onew y la princesa es TaeMin XD

GERANIO DE ROSA

Autor: AnSaGuCa.
Titulo: Geranio de rosa.

Genero: Slash.
Rating: Todo público.
Personajes: Kim JongHyun y Kim KiBum de SHINee.

Nota: la inspiración me la dio un video de Key con la canción de Sexy bitch de David Guetta y Akon.

Tiene un aroma dulce, intenso. Normalmente se utiliza en aceites y a nivel emocional permite el desarrollo de la voluntad en personas temerosas e indecisas ayudando a integrar el pensamiento y la acción. Además tiene un leve poder afrodisiaco.

Significa capricho.

GERANIO DE ROSA

La música rebotaba en las paredes del estudio de grabación; un remix de las más conocidas canciones de chicas de todo corea: SNSD, Miss A, Wonder Girls, Secret y un gran etcétera; pero yo, como siempre y al igual que todos los demás, solo lo miraba a él.

Key se movía sin pudor alguno acaparando la atención de todos los presentes, incluidas las inanimadas cámaras. No importaba cuantas veces lo repitiera en todos los programas en lo que salía, cuando Kim KiBum comenzaba a bailar, tenias que mirar solo y únicamente su persona.

En parte agradecía que lo enfocaran cuando bailaba y no me grabaran a mí con la posible expresión de necesitado que estaba seguro yo tenia.

Mi corazón rebotaba y lo sentía golpeándome el pecho con brusquedad a la vez que mis mejillas se coloreaban de un tono más fuerte de lo que las maquillistas se habían esmerado en darles. Mis pulmones se llenaron de aire y aguante la respiración involuntariamente.

Lo sabia, estaba concentrado, como todos (me fastidiaba repetir pero que es que no había nadie que no le mirara), en el movimiento que hacían sus caderas al subir y bajar. Tuve la necesidad de ver su rostro justo cuando él miraba el mío en una muy extraña coincidencia.

Nuestras miradas chocaron y solo logre abrir la boca torpemente, en cualquier momento comenzaría a babear. Afilo su mirada igual que un gato si es que eso es posible y me sonrió retándome… ¿retándome?

Mordió su labio y tiro su cabeza hacia atrás girándola sin dejar de sostener mi mirada. Sus caderas volvieron a girar primero suave y luego más rápido deteniéndose en un golpe que a muchos les hizo saltar y tragar con dificultad.

Le vi bajar la mirada a si mismo, moverse y luego sonreír en mi dirección. Mi mente solo gritaba una y otra vez que él me susurraba “tómame” con esos movimientos y no podía ya controlarme diciendo que era mi imaginación. Él se estaba sobrepasando conmigo.

Termino la canción, termino su baile y con una sonrisa casi tan grande como la de nuestro maknae le sonrió al conductor del programa donde estábamos; ya ni recordaba cual era.

Justo ahora recordaba que una fan, en internet, había dicho “Key´s a sexy bitch”. En aquel tiempo me disgusto demasiado su comentario; por mejores intenciones que tuviera no me agradaba cuando alguien insultaba a mis amigos. En este momento “sexy bitch” era perfecto.

- Hey –me llamo una vez se hubo sentado- ¿Necesitas ayuda con algo? –susurro sarcástico.

Tarde medio segundo en reaccionar. Gracias al cielo nadie más se había dado cuenta del problema que llevaba entre las piernas y tuve que disculparme lo más disimulada y rápidamente que pude hacia el baño.

No sabía que era más vergonzoso. Tener una erección a mitad de una grabación por ver bailar a tu compañero de grupo… o que él se diera cuenta.

- Damn –sabia que muchas veces las fans entendían algunas cosas que nosotros no pero en verdad, por todos los demonios- Bitch… sexy bitch.

EL SEÑOR GAY

Hace poco mi hermanita me conto que un chico se le declaro a JaeJoong, me pareció realmente gracioso y me puse a investigar hasta que di con la información. Así que este fic esta basado en un hecho real… con algunas modificaciones mías a favor del YunJae! XD

¡Gracias a la muchacha acosadora que vio el suceso y compartió este relato y a mi hermanita por comunicármelo!

Autor: AnSaGuCa
Título: El señor gay
Disclaimer: Si los DBSK me pertenecieran hace tiempo que los hubiera obligado a representar todos mis fanfics! Viva el JaeMin! XD
Trama: Un chico llevaba rato esperando fuera del edificio con un gran ramo de rosas…
Tipo: One Shot
Género: Shonen ai, romance, comedia.
Personajes: Jung YunHo y Kim JaeJoong de TVXQ
Clasificación: para todo público

EL SEÑOR GAY

Era ya muy tarde, pasadas las doce de la noche, pero no tenia muchos ánimos de llegar a casa por lo que caminaba lento y con calma. JaeJoong caminaba delante de mí.

En ocasiones algunas chicas esperaban fuera para darnos regalos, no era que me molestara, al contrario, pero era un poco preocupante el que se quedaran tan tarde por nosotros, ellas deberían cuidarse.

JaeJoong llego y, aunque yo iba un poco detrás, alcance a ver como un chico se le acerco, me preocupe un poco y acelere el paso, no suelo pensar en lo peor pero así como hay personas que nos esperan por regalos, hay otras que no tienen buenas intenciones.

El muchacho sostenía del brazo a JaeJoong, eso fue extraño.

- ¿Quién es usted? –pregunte. El chico me ignoro y fue cuando vi el enorme ramo de rosas que llevaba; el se las entrego a JaeJoong a la vez que decía:

- Las rosas que son tan rojas como tus labios… estas son para ti.

¿Qué? Esto era nuevo… bueno, en realidad no era la primera vez que un chico se le declaraba pero la situación no dejaba de ser extraña. JaeJoong se quedo paralizado.

El chico se arrodillo a sus pies y continúo:

- Estas flores ¿Estas dispuesto a aceptarlas?

JaeJoong llevo una mano a su boca, sorprendido y comenzó a reír nerviosamente. Por alguna extraña razón me molesto y actué sin pensar arrebatándole el ramo de flores.

- Señor, esto no es correcto…

- ¿No me digas que tú eres su amante? –dijo con ironía. No pude más que soltar una sonrisa torcida ¿Qué? Trataba de decirle que esperar después de las 12 a alguien (¡De tu mismo sexo!) para declararse podría hacerle ver como un acosador y me reclamaba que si yo tenia algo que ver con JaeJoong ¡¿Estaba loco?!

De pronto JaeJoong se agacho cubriendo su rostro. Me asuste, y estuve a punto de abrazarle hasta que le escuche reír a carcajadas… vaya, al menos el se estaba divirtiendo.

El chico me miraba retadoramente ¿Qué debía contestarle? Suspire y rodé los ojos, era casi imposible tomarse esto ya con un poco más de seriedad, JaeJoong no le correspondería a si que era mejor darle por su lado y hacer que se fuera.

- No voy a irme al menos que JaeJoong acepte mis flores –comento.

El estaba realmente molestándome. JaeJoong se incorporo y tomo las rosas que yo aun tenia, las acerco así a el y las olio con clama como si realmente estuviera disfrutando todo esto ¡Maldito!

- ¿Ahora que? –respondió JaeJoong.

- Por favor, tienes que estar conmigo –pidió.

¡Esto era el colmo! ¡¡Como se atrevía a pensar siquiera en la posibilidad de…!!

- Gracias por las flores, son muy bonitas… pero ya tengo a alguien –y soltó una risita cómplice. Me molesto ¡Realmente era molesto! Me miro brevemente mientras sonreía y actué tomándole de la muñeca a la vez que le arrancaba las flores y lo obligaba a meterse dentro de la casa.

Cerré la puerta de un portazo.

- ¿Me das mis flores? –me dijo juguetón. Se las avente a la cara ¿Por qué utilizaba ese tono?

- ¿Te gusto? –dije tratando de burlarme de él pero termino por sonar patético. ¿Pensaría que estaba celoso?

- Son muy bonitas –respondió evadiendo la verdadera pregunta que sabia había entendido perfectamente.

- ¿Porque no le dijiste que no y ya?

Se encogió de hombros y fue a buscar un jarrón para poner las flores.

- Supongo que… estaba esperando que reaccionaras…

Algunas veces JaeJoong me confundía.

Fin

IMAGINACION

Titulo: Imaginación
Autor: AnSaGuCa
Género: Slash
Personajes: Kim JunSu y Shim ChangMin de TVXQ
Extensión: One-shot

Advertencia: Lemon
Sumario: Nunca, nadie, lo imaginaria.

IMAGINACION

“Nadie lo sabría nunca… ni siquiera podrían imaginarlo.

Ahora que lo pienso hasta para nuestros compañeros de grupo sería difícil de creer.

Él y yo éramos el uno para el otro y aun así el resto del mundo nunca nos había visto juntos.”

- ¿ChangMin, puedes venir aquí un momento?

- ¡Voy!

Cerré el diario y lo guarde en su usual escondite: debajo de la cama; era un lugar bastante obvio para ocultar algo por lo que mis astutos compañeros preferían registrar toda la casa antes que ver ahí.

- ¿ChangMin, YooChun dice que fuste tú el que tomo el resto de la comida que guarde en el refrigerador, es cierto? –pregunto amenazadoramente JaeJoong.

- Sí, yo lo tome –respondí-, tenía hambre y pensé que eran las sobras.

- ¡Esas sobras iba a utilizarlas para la comida de hoy! ¿Es que no sabes ahorrar?

- No lo sé, el que cocina siempre eres tú, como iba a saber que lo estabas guardando para otra cosa.

- ¡Bien! ¡Pues el día de hoy tú vas a cocinar!

Me sorprendí, JaeJoong debía estar realmente molesto para que exagerara tanto, no era la primera vez que me comía lo que había en el refrigerador… ¿Seria solo por eso o ya estaría molesto por otra cosa?

- No creo que sea buena idea dejar que Minie cocine –comento YooChun.

- ¡Y no quiero que nadie le ayude! ¡Todos fuera de la cocina!

- No te estás pasando con ChangMin? –pregunto YunHo- El no tiene la culpa de que...

- ¡YunHo cállate!

Todos nos quedamos callados, era verdad que cuando JaeJoong se molestaba era como pocos pero jamás le había gritado así a YunHo.

- Regresare para comer –dijo, tomo sus cosas y se fue aporreando la puerta. YunHo le siguió.

- Parece que tuvo un mal día –rio JunSu.

- No tiene porque tomárselas conmigo –me queje.

- Te ayudaremos a cocinar –dijo contento.

- ¿Qué? ¡No decidas eso por todos Susu, tengo algo que hacer! –protesto YooChun.

- ¡Pero ChangMin no puede hacerlo solo!

- ¡Claro que puedo! ¿JaeJoong siempre lo hace, porque yo no? -ambos me miraron como obviando que yo simplemente no era capaz, me ofendí- ¿Estarás de regreso para la comida?

- Sí, solo voy a ver unas cosas con Ricky.

- Entonces traes el jugo y un poco de pan. JunSu pondrá la mesa.

YooChun salió de la cocina y espere hasta escuchar el sonido de la puerta para girarme y comenzar a sacar los ingredientes.

- Creí que le dirías algo, pero solo le preguntaste si vendría a comer –se quejo y yo sonreí.

- Quería saber de cuánto tiempo disponía para cocinar.

- ¿Cocinar? –pregunto; su tono era pícaro. Me abraso por la espalda y beso mi hombro.

- Sí; puedo perder media hora y aun así acabar antes de la hora del almuerzo.

Me giro y comenzó a besar mi cuello, se lo permití.

- Siempre pensando en todo.

- Debo ser precavido “Susu” –me miro, él sabía que no me gustaba que los demás le llamaran de esa forma.

- ¿Celoso?

- Un poco.

- Sabes que no tengo nada con YooChun.

- ¿Acaso a ti no te molesta esa enorme cantidad de comentarios donde estoy con JaeJoong? ¿Con YunHo? El otro día encontré uno donde YooChun me tomaba y…

Sus labios impidieron que continuara provocándolo. A decir verdad JunSu era un amor frente a las cámaras, incluso con los demás siempre se comportaba alegre y positivo pero a mí me había dejado conocer su verdadero interior... y lo amaba.

JunSu sabía lo que tenia y que yo me moría por él, era, en cierta forma prepotente y orgulloso cuando estábamos solos; nunca nadie podría imaginarlo; él era fuerte, decidido y dominante.

Sus manos jalaron mi cintura pegándome a él permitiéndome sentir su cuerpo.

- Esas solo son historias sin fundamento.

- No lo sé Susu, la verdad es que los labios de Chunie son tentadores.

JunSu abrió mi pantalón y me acaricio sobre los bóxers. Me mordí el labio, no quería soltar un gemido cuando se suponía que trataba de ponerlo celoso.

- Es verdad –me miro lascivo-, los labios de Chunie son tentadores. Quizá debería probarlos algún día -me moleste; trataba de revertirlo en mi contra y le funcionaba.

- No.

- ¿No qué? ¿Me lo prohíbes?

- Te lo prohíbo.

- No minie, el que manda soy yo. No puedes impedirme nada.

- No soy tu juguete, te prohíbo que estés con YooChun.

Bajo mi bóxer y tomo mi miembro. Gemí.

- Eres mi juguete.

- Creo que prefiero al JunSu lindo que es incapaz de sobreponerse sobre alguien más.

Sonrió y comenzó a mover su mano, masturbándome. Se acerco a mi oído y mordió mi oreja.

- Sabes que estas mintiendo. Te gusta.

- No.

- ¿De verdad? –me miro un poco confuso, inocente- Entonces, supongo que debería dejarlo.

Se retiro, dejándome confundido y con un gran problema. Salió de la cocina.

- ¡No puedes dejarme así! –le grite.

- Pero no te gusta –me contesto, su voz se alejaba de la cocina.

- ¡Me gusta! –grite más fuerte- ¡JunSu, me gusta!

No podía creer hasta qué punto me había cambiado; jamás creí que le suplicaría a alguien por un poco de sexo.

- Demonios… -recogí mi ropa y me dirigí al baño.

- ¿Eso es todo? –me dijo desde su habitación.

- ¿Qué quieres que haga?

- Sabes bien lo que quiero que hagas.

Avance hasta donde él estaba, lo bese y me coloque encima de él tirándolo en la cama. Comencé a besar su cuello e iba bajando conforme iba desabotonando su camisa. Llegue a su ombligo y metí mi lengua, haciéndolo reír.

Desabroche su pantalón y se lo quite mandándolo a saber donde junto con su ropa interior.

Me acerque a él para besarlo y tomo mi rostro con fuerza haciéndome ver quién tomaba el liderazgo. Era un poco humillante y luchaba diciendo que él dirigía solo porque yo se lo permitía, pero la verdad es que me gustaba, me gusta esa mirada lujuriosa en mí, esa mirada que solo yo le provocaba.

- ¿Aun quieres que sea dulce contigo?

- No.

- Prosigue.

Baje hasta su miembro y comencé a besarlo, dando de vez en cuando algunas lamidas y mordidas suaves.

- Cuidado ChangMin.

Lo metí en mi boca tratando de abarcar lo más me fuera posible. Gimió fuerte y llevo una mano a mi cabeza para indicarme la velocidad a la que debía moverme. Debo admitir que la primera vez fue muy extraña y cometí muchos errores, pero ahora disfrutaba y esperaba con ansias la siguiente oportunidad.

Tomo con fuerza mis cabellos y me aparto, aventándome a la cama.

- No quiero terminar en tu boca.

Sus ojos brillaban de lujuria y fue suficiente para soltar un gemido de mi parte.

Me jalo haciéndome quedar debajo de él y me penetro de una sola vez. Grite y lleve mis manos a sus hombros sembrando mis uñas y haciéndole sangrar. No importaba cuantas veces fuera, seguía doliendo hasta desmayar. No se movió y espero a que me acostumbrara.

Comenzó suavemente cuando noto que dejaba de ejercer presión sobre sus hombros. Movimientos suaves que pronto se convirtieron en golpes frenéticos en mi interior; pronto el dolor se convirtió en placer y la habitación se lleno de gemidos por ambas partes.

Tuve que terminar entre ambos y poco después él dentro de mí. Se dejo caer sobre mí, cansado.

- Pesas –le dije.

Se movió un poco hasta resbalar junto a mí.

- Te amo –me dijo. Mis mejillas se incendiaron y gire la vista hacia la puerta.

- No tienes que decirlo cada vez que tenemos sexo, no soy una maldita chica.

- Claro, ahora ve a bañarte para que puedas hacer el almuerzo, cariño.

Me senté en la cama, buscando donde había quedado mi ropa.

- ¿Qué dirían los demás si se enteraran de esto? –pregunte.

- Nadie lo imaginaria. En todo caso, yo soy un ángel inocente, tú eres el malo del cuento que me pervierte.

- ¿Yo te pervierto?

- ¿Acaso crees que haría esto con cualquiera? Si no fueras tú yo sería un trocito de pan.

- ¿Así que soy mejor que los labios de YooChun?

- Bueno, quizá -tome una almohada y le di fuerte; hice un puchero de enojo y me miro sonriente-… quizá sus labios sean tentadores, pero tú eres lo único a lo que no puedo ni quiero resistirme.

Desvié la mirada. Mi rostro estaba colorado y lo sabía, era imposible que no lo notara.

- Voy a bañarme.

- ¿No dirás que también me amas? –dijo tranquilo con una expresión de total ternura en su rostro ¿Cómo era posible que cambiara tan drásticamente a su conveniencia?

- Te amo.

Sonrió y sus mejillas adquirieron un leve tono carmesí.

Me dirigí al baño y me di una ducha rápida para terminar de preparar el almuerzo antes de que llegaran los demás; me había retrasado más tiempo del que había planeado y no tardarían en aparecer todos preguntándome que me había sucedido.

Prepare un simple revoltijo de todo lo que encontré y algo de sopa simple. No era lo mejor pero era mi especialidad.

Cuando a todos les dio por aparecer yo casi acababa los últimos detalles y JunSu colocaba la mesa.

- Perdóname minie –me dijo JaeJoong entrando a la cocina con la cabeza gacha- ¡Mi hermana estuvo dando información sobre mi y estaba molesto, ya le dije varias veces que no diga nada de mi infancia! -no sabía de qué información hablaba o a cuál de sus hermanas se refería, pero continúe con mi parte.

- Perdóname por agarrar las cosas sin avisar, la próxima vez prometo preguntarte.

- ¿Sufriste mucho cocinando?

- Solo un poco, me las arregle con la ayuda de JunSu.

- Oh, me alegro. Vamos a comer, te ayudare a servir los platos.

FIN